El CEO de Microsoft Steve Ballmer anuncio en la reunión anual de accionistas que Windows Phone estaba vendiendo cuatro veces más que el año pasado, incluso hizo referencia a la falta de stock en varios lugares por el exceso de demanda.

Es cierto que no dieron cifras reales de ventas, y que las ventas hasta la fecha no fueron todo lo buenas que Microsoft y sus partnerships querrían, pero multiplicar por 4 las ventas es bueno lo mires por donde lo mires.

Desde algunos sectores se mantiene el escepticismo sobre estos halagüeños resultados y bien es cierto que mientras no publiquen las cifras seguirán existiendo estas dudas. Pero por nuestra parte dudamos mucho que se cuelgue el cartel de agotados, en referencia principalmente al Lumia 920 y al HTC 8X en algún lugar como Hong Kong, por puro marketing, y menos cuando hay gente tan importante involucrada como Amazon, Wal-Mart, o AT&T. Incluso cuando están apareciendo cartas públicas de clientes recibiendo disculpas por el retraso de sus terminales. Incluso ya se están estimando unas cifras oficiosas de venta de los Nokia Lumia con WP8 y se habla de 2,5 millones de unidades en 20 días.