La notica que más relevante nos ha parecido de todo el Build 2014 ha sido esta y vamos a proceder a analizar sus razones y consecuencias a nuestro modo de ver.

Windows gratis en dispositivos de menos de 9 pulgadas y lo que Microsoft ha querido llamar el internet de las cosas IOT por sus siglas en inglés (Internet Of Things). Este puede que sea uno de los movimientos estratégicos más agresivos de Microsoft en los últimos años. Que una empresa que basa su subsistencia en el licenciamiento de productos y el cobro por estas licencias se podría interpretar que dejar de cobrar por esas licencias es un golpe a su línea de flotación y en cierto modo podemos decir que si lo es, pero más controlado de lo que se cree.

Lo primero y más importante que hay que entender es que las licencias gratis con para los Partners de Microsoft que fabrican hardware susceptible de montar Windows. No para los usuarios que piensen en comprarse un hardware y luego pedir un Windows.

El segundo punto de importancia y quizás el vital de todo este asunto es el límite de tamaño para poder optar a licencias gratuitas. Esta obvio que por debajo de 9 pulgadas de pantalla se están creando productos para un tipo de consumidor de Ocio principalmente y por encima de eso Microsoft entiende que ya entramos en el sector productivo y empresarial y ese es intocable. Es donde los de Redmond son los reyes y albergan sus cornucopias con Office a la cabeza.

A nadie se le escapa que a Microsoft le está costando más de lo esperado ganar cuota de mercado a iOS y Android y están dispuestos a rediseñar su modelo de negocio en este segmento de los consumibles poniendo todo de su parte y una manera de hacerlo es ayudando a los fabricantes a crear nuevos dispositivos con Windows ya sean tablets, teléfonos, relojes, gafas o lo que se les ocurra. Para ellos ha tomado medidas y una de ellas es abaratar el producto, tanto como ponerlo a coste 0€ amén de otras acciones como habilitar botones virtuales y eliminar requerimientos hardware que faciliten y abaraten la fabricación de terminales Windows Phone.

En este sentido, desde Microsoft nos afirman que los requisitos hardware se han reducido tanto que se podría incluir en terminales Android existentes. Hasta el punto de que se ha aligerado el peso del hardware en un 90%.

El precio que se cobraba por cada licencia de Windows Phone es otro de los puntos a estudiar. En la actualidad el coste de una licencia de Windows Phone o de Windows no era tan alta para los fabricantes pero incidía en el precio. En el caso de Windows más directamente por ser más cara y en el caso de WP la incidencia es más indirecta en los requerimientos hardware. Si a este precio reducido (WP podría estar entrono a los 13€) le unimos que por debajo de las 9 pulgadas de pantalla los equipos Windows poseen una cuota de mercado relativamente baja (pocas unidades) podemos llegar a la conclusión de que la falta de ganancia por esas licencias no resulta vital. Hombre, de Perogrullo es pensar que Microsoft no preferiría cobrar por ellas, pero ahora mismo les es más importante para el medio y largo plazo ganar presencia en este sector que los réditos que podían ofrecerles estas licencias.

¿Significa esto que Microsoft declara la guerra abierta a Google y Apple? Yo no respondería a esta pregunta, en este caso creo que lo adecuado es el sistema gallego. Otro pregunta ¿es que acaso no la tienen ya desde hace tiempo?

La gerra entre estas compañías bien de lejos, lo que pasa es que uno de los actores ha tomado un nuevo rumbo que llama mucho la atención y que no se esperaba. Esto no hace mas que habar muy bien del trabajo que están haciendo los otros 2, pero con esta decisión Microsoft ha decidido subir el calibre de la artillería y hace una jugada de peso que a buen seguro tendrá respuesta por parte de Apple y Google.

Por el momento las consecuencias más inmediatas son que los fabricantes comenzaran a mirar con mejores ojos los productos de Microsoft y valorar muy en serio aumentar notablemente sus productos con plataforma Windows. Esto les permite tener una salida viable y económica ante unos posibles cambios en la por el momento buena relación con Android. También les permite aumentar su oferta de productos sin aumentar los costes y sin reducir sus márgenes, lo que por ende resultara en una mayor oferta de equipos Windows a medio plazo, que es ni más ni menos el FIN que persigue Microsoft con todos estos movimientos.

La mejor forma de ganar cuota de mercado es tener oferta de equipos en la calle y a día de hoy si puede ser equipos de muy bajo coste. Sector donde Windows Phone está apoyando su crecimiento por méritos propios junto con la Finesa (por el momento sigue siéndolo) Nokia y su Lumia 520.

Windows Phone requiere de muy poco hardware para funcionar y funcionar bien, manteniendo la fluidez y la misma experiencia de usuario que una alta gama algo que ninguno de sus competidores puede decir. Android tiene multitud de virtudes, pero también algunas desventajas importantes como es la diferencia de rendimiento exagerada que se produce entre la alta gama y la baja. Llegando a ser exasperante usar un equipo de los más económicos. Por su parte iOS es un compendio de bondades, pero su principal tara es que hay que disponer de 700€ (mínimo) para enterrar en un dispositivo móvil que querremos cambiar al año y medio. Y no mucha gente puede permitírselo.

Por tanto a Windows Phone le faltaba una evolución importante del sistema y abaratar su adopción por parte de los fabricantes y ahora con las licencias gratis, la reducción de requisitos hardware y Windows Phone 8.1 que no es que llegue a la altura de la competencia si no que la supera en muchos aspectos ya tiene las armas para ganar esta guerra. Veremos si al final son suficientes y si son capaces de continuar esta línea positiva de la nueva era Satya Nadella.