Ya os hemos contado hace un rato los cambios que se rumorean para Windows Phone 8.1. Ahora vamos analizar que pueden aportar cada uno si nos parecen positivos o negativos y el pro que de cada uno.

Lógicamente solo estamos especulando, ya que no es seguro que estos cambios aparezcan, pero trataremos de entender cada uno de ellos para valorar su viabilidad o no y la posibilidad de que se conviertan en realidad.

Como casi todo en la vida hay parte buena y parte mala, la parte buena o positiva seria los binarios, la multitarea y los tamaños de pantalla y la parte mala el botón atrás y la alta gama.

Lo bueno

Unificar desarrollos para varias plataformas implicara el trabajo y acercara a los desarrolladores a las dos plataformas, sería un poco seguir la línea de iOS en sus teléfonos y tablets. La multitarea cada día funciona mejor con lo que no es algo preocupante, si mejorable pero no alarmante, ahora, lo que es evidente que tiene que mejorar ampliamente son las notificaciones y las tareas en segundo plano, algo que cojea demasiado en Windows Phone. Y en cuanto a las pantallas de mayor tamaño, pues no es algo que quite el sueño, con llegar a 6 pulgadas creo que para un teléfono ya es casi exagerado, por lo que está bien tener la opción de pantallas mayores, pero no lo considero necesario, a menos que sus planes sean otros.

Lo malo

Los terminales de alta gama están muy bien, y todos queremos uno, pero el mercado demuestra que lo que más abunda es la gama media y baja. Microsoft cuenta con una ventaja extraordinaria, que es que su OS es capaz de trabajar con fluidez en terminales con recursos limitados, algo que ni iOS ni Android pueden hacer, con lo que tiene una posibilidad de aumentar cuota de mercado en el sector bajo y medio y luego ya coparan el segmento alto o de lujo. Consideraría un error de bulto centrarse demasiado en los terminales de alta gama y olvidarse de la gama media baja.

Eliminación del botón atrás. Otro gran error, quizás el mayor de confirmarse este rumor. El botón atrás es muy natural en su uso, cualquier persona que le dejas un WP en cuestión de segundos se acostumbra a usar el botón atrás, por lo que no creo en la teoría de la usabilidad.

Aparte esto obligaría a modificar absolutamente todas las apps que existen en la Store, porque ninguna de ellas está diseñada para usar un botón atrás (vale, algunas portas de iOS sí, pero son simbólicas). Esto ya de por sí sería una locura, pero es que además, para que el cambio produjera algún beneficio en la experiencia de uso, o por lo menos no la perjudicara, tendrían que generar un manual de estilos a la hora de diseñar muy estricto que no dejaría nada de libertad a los creadores. Si cada app coloca los botones donde le apetezca, como el caso de Android seria caótico y perdería la uniformidad que ahora presenta Windows Phone. En resumen un desastre.

Pero claro, todo esto puede ser cierto y tener sus razones subyacentes.

¿Por qué centrarse en los terminales de alta gama? Vale, esto podría tener su lógica. Recientemente se os comentamos unas conversaciones de Microsoft y HTC en las que se proponía ofrecer Windows Phone como opción en todos los modelos de HTC, y no será de extrañar que ese acuerdo de proliferar se extendiera a otros fabricantes. SI esto ocurre, Microsoft dejaría el grueso del mercado las gamas media y baja para los fabricantes OEM y se centraría en fabricar sus propios Lumia de gamas altas y calidad. Con un acuerdo de este tipo todos contentos y todas las gamas de mercado cubiertas.

¿Por qué eliminar el botón “Atrás”? Esta decisión podría estar justificada por la unión con Windows RT. En Windows no hay botón físico atrás, y esto obligaría a usar controles diferentes e interfaces diferentes a las dos plataformas lo que se cargaría la ansiad afusión de tiendas y plataformas.

Pero incluso podemos ir más allá, si a esto le unimos los nuevos tamaños de pantalla de entre 7 y 10 pulgadas, nos da que pensar que quizás la unificación de Windows Phone y Windows RT en un futuro será más intensa, hasta el grado de convertirse en una sola plataforma. A medida que los teléfonos crecen y las tablet encojen se llega a una finísima frontera que se difumina con facilidad. Al final lo más natural seria que se convirtieran en un solo producto. Pero ya veremos cómo avanza el tiempo.

Esto es lo que nosotros interpretamos de estos rumores, ¿qué pensáis vosotros?